Oración de Gratitud: La Pluma
En un inmensa poema de amor
Escrito con el misterio de Tu obra
El mortal humano se esfuerza por encontrar,
Trata de comprender acercandose cada vez más
A los entresijos de su lenguaje.
Pero tropieza a menudo en el camino
Terminando de nuevo en el lugar donde comenzó
En la busqueda del sentido.
En el quinto día, o eso dice
Apareció en el tiempo –
Esa continuación interminable de espacio creado para
La expresión de Tu amor sin fin –
Un pájaro, tan sabio y real
Y sentado quieto en una rama
Contemplando la grandeza de la oscuridad
O el esplendor de la luz de la luna
Proyectando sus sombras nocturnas sobre
La extensión de esto soneto.
Con un solo deslizamiento de Tu lápiz y pincel
En siete días o mil milliones de años quizás
Todo envuelto y moldeado juntos
En un hermoso continuo de Tu tiempo escondido.
Sabiduría heredada por Pedro, tu roca:
“Un día es como mil años y mil años como un día.”
De vez en cuando el pájaro en su propia sabiduría
Interrumpe el silencio de la noche
Puntuando el flujo del tiempo con sus ululatos
Recordándonos de nuestra humanidad
En la medición de los momentos
Con el tictac de la noche
El lento tiempo marcado en su oscuridad.
Y de repente el pájaro despliega sus alas
Se eleva por encima de las copas de los árboles
Rastreando la tierra
Para su sustento y satisfacción.
Y cuando sus ojos, acostumbrados
A las sombras de la noche observa su presa
Descende con rápidez y majestad
Cazando y atrapando y saciando su hambre
Como Tú lo determinaste.
Deja caer una pluma que acaba en mi camino
El que siempre frecuento en la claridad de la mañana.
En su impactante belleza de rayas y color
Me llama desde la tierra.
Y me pregunto sobre los millones de años
Del accidente y evolución necesario
Para crear un plumaje tan bello y tan único.
Es para mí, la pluma del pájaro real
Cazador de la noche.
Lo guardo en el cofre de mis tesoros
Para contemplar con la ayuda de Dios y Sus ángeles.
Hay un dolor punzante en el centro de mi ser
Alejándome de las listas y de los niños –
Deberes de mi vida diaria.
Pienso en Ti y me doy cuenta
Que preferiría estar en Tu casa,
La fuente eterna de paz y descanso.
Pero estás lejos mientras paseo al perro
Y entonces miro hacia arriba y Te veo.
Brillando en el esplendor blanco de la luna.
A veces brillante, y otras veces oculto
Mientras las nubes vuelen y tapan Tu rostro.
Pero nunca ausente. Siempre estás ahí.
Mientras tomo la pluma de mi pájaro real
Y escribo estas palabras
Con el instrumento de Tu amor
En humilde adoración de Tu presencia sin fin.
Amen